yo nunca fui reina de las fiestas

yo nunca fui reina de las fiestas

viernes, 13 de julio de 2012

LA INDIGNA DA




Vuelvo a escribir después de mi resaca de exámenes. Examinarse es un auténtico rollo. Creo que, si lo pienso, no dejamos de hacerlo nunca, y eso que sólo hablo de lo estrictamente curricular… En realidad,   las autoexigencias a menudo no son suficientes, teniendo que cumplir expectativas ajenas y someternos a la escrutadora mirada del otro, constantemente.
¿Esto será igual para todos?
Hoy, con bastante tristeza, observo las desigualdades. Pienso en la diputada Andrea Fabra y en su repugnante comentario desde el sillón que ocupa gracias al buen hacer de su papá. ¿ella se habrá examinado alguna vez? ¿lo habrá necesitado? se me ocurre que quizá, ni en sus peores pesadillas, habrá sido capaz de visualizar las largas esperas en las oficinas de empleo, las dificultades para el acceso al mercado laboral de algunos sectores de la población y los dramas familiares que provoca la situación que atraviesa nuestro país. Quizá no conoce la palabra EMPATÍA, tampoco RESPETO. Eso que básicamente nos viene dado con una educación más o menos normalita, sin internados Suizos ni vacaciones en Sotogrande; eso que, por ejemplo, te permite apenarte por los Subsaharianos que arriesgan su vida cruzando el Estrecho a bordo de una patera, sin conocerlos de nada y con la seguridad de que tú ¿nunca? te verás en su pellejo. Exactamente ESO.
Qué poco tacto, que falta de sensibilidad... ESO! que nos jodamos! que nos convirtamos en saqueadores, que luchemos, literalmente, con uñas y dientes, por lo nuestro; por lo material y por la dignidad, que seamos gladiadores, peleando a vida o muerte por lo que el Estado de Bienestar un día nos prometió. 
Señora, se ha equivocado, esto no es Esparta, es España. (y no se olvide: A CADA CERDO LE LLEGA SU SAN MARTÍN) Feliz fin de semana! http://www.youtube.com/watch?v=bh6eznhPcOo 

jueves, 24 de mayo de 2012

¿Elige?



"Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas. Elige lavadoras, coches, equipos de compact disc y abrelatas eléctricos. elige la salud, colesterol bajo y seguros dentales. elige pagar hipotecas a interés fijo. Elige un piso piloto. elige a tus amigos. elige ropa deportiva y maletas a juego. Elige pagar a plazos un traje de marca en una amplia gama de putos dígitos. elige bricolaje y preguntarte quién coño eres los domingos por la mañana. Elige sentarte en el sofá a ver tele-concursos que embotan la mente y aplastan el espíritu mientras llenas tu boca de puta comida basura. elige pudrirte de viejo cagándote y meándote encima en un asilo miserable, siendo una carga para los niñatos egoístas y hechos polvo que has engendrado para reemplazarte. elige tu futuro. Elige la vida. Pero ¿por qué iba yo a hacer eso?..."
...Voy repitiéndolo mentalmente mientras atravieso el Paseo de Recoletos y pienso en lo mucho que me gusta Madrid ( y en que necesito hacerme con un ejemplar de Skagboys)
Han pasado muchos años desde que escuché esas palabras por primera vez, pero aún hoy, y aún sin quererlo, siguen poniéndome la piel de gallina. De carrerilla y en la voz de Mark Renton sonaban como un poema lejano, aunque sonrío al comprobar que me encuentro más que familiarizada con muchos de los conceptos “a elegir”.
¿Elegimos en realidad? ¿Cuántas veces a lo largo de nuestra vida? ¿Importa? Y a día de hoy… ¿Podemos elegir?
Todo vuelve: las modas, las políticas, las drogas, la crisis, la recesión, ¿las oportunidades?, no siempre, no en la misma medida.
Adoro la vida; adoro mi vida, hecha a imagen y semejanza de mis deseos y mis necesidades pero de repente me preocupo… ¡veo Gran Hermano! (y me gusta), si no engordase, comería hamburguesas varias veces por semana y empecé, llena de ilusión, una carrera que hoy no me satisface. Si continuo con cada punto mi preocupación irá en aumento, pues los paralelismos son enormes, ¿o son comunes?¿corrientes?. Nunca quise ser común, siempre yo, mejor o peor. ¿Esto es posible? No puede ser que todos queramos lo mismo, que todos terminemos igual ¿o sí? que alguien me lo diga, por favor, porque de ser así, y para evitar la profecía completa recitada por Ewan McGregor mientras corría por las calles de  Edinburgo, me ahorraré el colegio privado de los niños y destinaré los fondos a elegir la mejor residencia del mundo (y un Amazona de Loewe a plazos), por supuesto, “mirando hacía adelante hasta el día en que la palme”. http://www.youtube.com/watch?v=qrvUWSQZMYk

viernes, 4 de mayo de 2012

Dani y Roberta


Ya ha llegado el fin de semana, y hoy me permito el lujo de hacer una recomendación: Dani y Roberta, la mejor obra de teatro que he visto en mucho tiempo.
El programa ya adelantaba una historia intensa, cruda y de sentimientos puros y nada edulcorados. La puesta en común de la vida de dos personas que sienten la indiferencia del paso del tiempo, sin apenas protagonismo, aterrados por la idea de que algo mejor es posible y por permitirse experimentarlo.
Me encantó, y como a mi, a todos los que la vimos. La temática, aunque dura, excelente para los que somos apasionados de los sentimientos y el amor. Dramática y cómica, tierna y agresiva, combina a la perfección los tiempos para hacer que los 90 minutos de representación transcurran casi sin darte cuenta, sonriendo y aguantando alguna que otra lagrimita. 
Mi mayor elogio es sin duda, para los dos protagonistas: ella, Itziar Miranda, buenísima, pura expresión; él (quien debo reconocer  fue mi mayor reclamo) Álex García, impactante, no sólo por su imponente físico (que apenas deja lugar a la imaginación), sino por su capacidad de mostrar el lado oculto de lo underground, despertando en quien le observa el temor y la ternura a partes iguales. Desde luego, si su cambio de registro está orientado a continuar sobre las tablas, habrá merecido la pena despedirse de César Bravo.
¡No os la perdáis!Sala pequeña del Teatro Español, hasta el 15 de mayo. http://www.youtube.com/watch?v=O4fdrHsicdo







miércoles, 25 de abril de 2012

EL MAESTRO LIENDRE



Seamos francos... uno no puede saber de todo en esta vida, así es, por mucho que nos fastidie...
Hoy, y al hilo de las noticias matutinas, me pregunto: -¿puede una persona, dedicada en cuerpo y alma a la vida eclesiástica, dar lecciones sobre el amor romántico entre individuos?- ¿puede hacerlo, de igual forma, con respecto al sexo como expresión del amor o la diversión entre adultos? -¿puede un cura hacer un diagnóstico médico sin base alguna?- ¿no es esto, acaso, INTRUSISMO? 
Desde hoy, y en lo sucesivo, toda aquella persona, hombre o mujer, que se sienta confuso o  haya sentido atracción hacia alguien de su mismo sexo, está de enhorabuena, el obispo de Alcalá de Henares, en Madrid, les va ayudar antes de que avancen por el "tortuoso sendero gay", ya que ellos todavía están a tiempo... Si por el contrario eres de l@s que ya han conocido la "pecaminosa carne del fruto prohibido", no desesperes... él, piadoso y sabio, también te va a ayudar, pues, a pesar de estar "afectado" por tan "extendida epidemia", sabe cómo puedes curarte de semejante "enfermedad".
¿se extralimita la Iglesia Católica? la presencia en los medios de sus representantes no resulta sino contradictoria:  por un lado, aparecen curas moteros, modernos, comprometidos, sociatas, etc pero cuando uno puede empezar a vislumbrar un cambio, vuelve el tufillo rancio y déspota de antaño... ¿Se les reprocha a estos señores que lleven una vida austera y veneren la figura abstracta de un dios todopoderoso? ¿se les permite que prediquen su doctrina? ¿se acepta que, voluntariamente, renuncien a relacionarse sentimentalmente y a formar una familia? ...
Me encantaría conocer a este obispo... ¡SuperObispo!, podría enseñarme tantas cosas...habría tanto que preguntarle... - Su Excelencia, ¿las monjas que roban niños también se pueden curar?- ¿qué tipo de mal aqueja al adulto célibe que manosea lascivamente a un menor?-... 
Cuánta sapiencia...Prometo no volver a comprar sujetadores sin antes  preguntarle si algodón o microfibra...

martes, 3 de abril de 2012

El día que murió mi tortuga

                     
  


Qué casualidad, esta mañana me ha venido a la memoria...
...debía tener 17 años y había madrugado mucho porque tenía que coger un autobús rumbo a las fiestas del pueblo (esas en las que nunca fui Reina). Era verano, todavía no había amanecido y ya hacía un calor sofocante, recuerdo que, como siempre, estaba nerviosa por el equipaje, el viaje sola... Antes de dar el último vistazo a la maleta, miré el acuario de las tortugas y me acerqué a despedirme; una de ellas estaba fuera del agua y tenía la cabeza ladeada y apoyada en el suelo, algo no iba bien; había estado enferma, tenía un déficit de vitamina A y sus ojos se habían cubierto por una telita haciéndole estar prácticamente ciega; durante meses (y aunque suene a chiste) le echaba colirio dos veces al día e intentaba que comiera de mi mano, cosa bastante complicada porque, al no ver, se asustaba del  propio alimento. Supongo que estaba muy débil y no pudo más. Antes de marcharme bajé al jardín con una cuchara y una botella de agua para conseguir ablandar la tierra seca y poder enterrarla. No podía dejar de llorar, se había muerto y lo sentía de verdad. No era un perro, ni un gato, no podía acurrucarme con ella, pero la iba a echar tanto de menos...
No sé a cuento de qué hoy me he acordado, qué curioso,  horas más tarde, al abrir facebook, una amiga había colgado una noticia donde, con verdadero asombro (y congoja), he leído que en China es habitual que vendan tortugas vivas flotando en un aguachirri como llaveros o souvenirs. No me puedo creer que a estas alturas de la vida seamos tan cafres y tan descerebrados... ¿qué gracia tiene esto? ¿alguien lo comprará? ¿y cuando la tortuga muera de fatiga y hambre y empiece a descomponerse? vaya cuadro... nuestro sadismo, y el ansia de dinero a toda costa, no tiene límite. Se nos va la olla, qué pena... http://www.youtube.com/watch?v=eGR1iDuKabU

miércoles, 21 de marzo de 2012

Pequeños despistes ¿sin importancia?




-Como no te sientes bien, vendrá un hombre y te llevará a una cueva muy oscura...- esto fue lo último que escuché el jueves, mientras iba camino del trabajo y justo antes de comprobar que me había pasado de estación... Bilbao. ¿Bilbao? Ni siquiera recordaba que la línea 1 pasara por allí. Estaba leyendo un artículo sobre la influencia japonesa en la moda que viene, y no me dí cuenta; lo peor de todo es que tienes que dar la vuelta, llegar tarde y repetirte a tí misma que le puede pasar a cualquiera. Sí, a cualquiera, pero ¿dos veces en la misma semana? Hace días, volviendo a casa, me senté en el metro y desperté al final de la línea, nunca me había dormido tan profundamente como para no escuchar la locución de mi parada... 
La verdad es que encuentro una pequeña disculpa en el ritmo frenético de mi cabeza en los últimos meses, dicen que sólo utilizamos una décima parte de nuestro cerebro, pero yo he tenido esa parcela funcionando a pleno rendimiento, y, por lo que parece, no creo que, en lo sucesivo, pueda tomarme un respiro... 
Estoy en un avión camino de Londres y mientras escucho la "¡amplísima!" oferta que las irritantes azafatas de Ryanair nos ofrecen cada cinco minutos, observo perpleja a mi compañera de asiento mientras moja un panini de queso en su sopa de champiñones (a quién me recuerda?...) y pienso que hacía mucho que no escribía en el blog, lo siento, he estado muy cansada, intentaré que no vuelva a pasar tanto tiempo sin contacto, más que nada porque, ahora que sé que existe un hombre que viene y te lleva a una cueva muy oscura si haces algo que no le gusta, no quiero jugármela... 
Voy a disfrutar de la ciudad, de su lluvia, de sus tiendas, de su música y de su cultura de club, sin agobios, sin prisas, sin preocupaciones... Aparco la incombustible Madrid por unos días para recibir Londres en estado puro, como una londoner más... see you all!  http://www.youtube.com/watch?v=1lyu1KKwC74

domingo, 29 de enero de 2012

Bye Bye love



Nada es para siempre (que diría una canción popular) … o citando a “La Más Grande”: “se nos rompió el amor de tanto usarlo”…
Parece que últimamente no corren buenos tiempos para los amores de cuento, esos en los que ya habíamos empezado a dejar de creer hasta que llegaron ellos…
La semana pasada, y gracias a Anne Igartiburu, supe que Heidi Klum y Seal se separaban, alegaron ese tipo de cosas que ahora están tan de moda:  “nos hemos distanciado”, “diferencias irreconciliables”, “cese temporal (o definitivo) de la vida conyugal”, “seguimos siendo muy amigos”, bla bla bla…¡ vamos, que se acabó!
Pues eso, que lo pueden decir como quieran, pero que les pasa como al resto de los mortales: de todo se cansa uno. Y no importa si eres una super modelo y te has tatuado el nombre de tu “chocolatito” en el brazo, si cada Halloween ideáis un disfraz en pareja que causará furor entre vuestros vecinos celebrities, o si repetís vuestra boda cada cierto tiempo con una temática distinta… Es igual.  La rutina aparece y… ¡sálvese quien pueda!. Existen maravillosos remedios para combatir este mal tan extendido, pero como la mayoría de las cosas importantes, salvar una relación del tedio y el estancamiento supone un gran esfuerzo y mucho mimo y dedicación; descubrirse en pequeñas dosis para evitar que quien está junto a nosotros confíe en que “todo está hecho” y crea que nada puede llegar a sorprenderle, y no todo el mundo está por la labor… a veces se ahorra energía tirando la toalla, volviendo al mercado y publicando tus ofertas y demandas por si aquel príncipe/princesa azul/rosa (que creías haber encontrado) aparece definitivamente.
Es una pena… hacían buena pareja. Él aparentaba ser un tío sensato, majete, no sé… y ella, bueno, espero que le vaya bien, que después de haber visto a Briattore en tanga (o sin él) la pobre chica ya ha tenido suficiente.
En el caso de Demi Moore la cosa ha terminado siendo más trágica, está semana, según apareció en todos los periódicos “era ingresada de urgencias en un hospital de Los Ángeles por abuso de sustancias”, parece ser que como consecuencia del mal momento que pasa desde que se separó de su marido.
Aquí yo siempre he sospechado que la cosa no acabaría bien, llamadme antigua, pero creo que para tener un novio/amante/marido (tan irresistible, tan socarrón y tan mediático)  15 años menor que tú, tienes que ser una persona muy segura de ti misma y con una gran autoestima, si no, estás avocado a la más absoluta infelicidad/intranquilidad, a que los celos te desquicien y a acabar pensando, como esta mujer: "Lo que me asusta es llegar al final de mi vida y terminar descubriendo que no merezco que me quieran, que dentro de mí hay algo que no funciona y que no me han querido desde un primer momento". ¡¡Pero qué invento es este!! El asunto no es que ella no sea digna merecedora de amor, es sólo que el "irresistible de su toy boy", habiéndose cansado del sabroso "caldo de gallina vieja", decide volver a probar las mieles de la juventud, más semejante y más en sintonía con sus necesidades vitales en ese momento, y es que según indicaba un estudio desarrollado en Alemania por el Instituto Max Planck, "la diferencia de edad en una pareja no es sólo un problema social; nuevos estudios revelan que amar a alguien de otra generación tiene también consecuencias para la salud física y psíquica. Los hombres que están con mujeres más jóvenes aumentan su expectativa de vida, mientras que la mujer que se une con un hombre mucho más joven, incrementa su riesgo de mortalidad hasta en un 20 por ciento". En definitiva, que además de ser un sin vivir...¡dejas de vivir!. El estudio no dice nada sobre el caso contrario, pero, por lo que se ve, hasta en esto las mujeres llevamos las de perder...
Demi, ánimo, los yogures (aunque los haya tan ricos como el tuyo), mejor de los que te ayudan a regular el tránsito intestinal, y si agrían... ¡a la basura!http://www.youtube.com/watch?v=-Hg1DvYndBw  Pues anda que no estás tú estupenda!!! XD